En cuanto al medioambiente como mal público mundial, el asunto ingresó a la agenda internacional en los años setenta, mientras que como objeto de estudio de las Relaciones Internacionales, sus primeros abordajes teóricos iniciaron a principios de los noventa, a la par de la institucionalización del medio ambiente en la política internacional. Y es que, el desfasamiento entre una fecha y la otra tiene su origen en sucesos externos. Por ejemplo, los hallazgos que desde los años sesenta se dieron en otras disciplinas científicas y que enfatizaron sobre la relación existente entre el crecimiento económico y el deterioro ambiental (cuestionando los límites del crecimiento) orillaron a los Estados a organizar, en 1972, la primera cumbre sobre el medio ambiente, mejor conocida como la Conferencia de Estocolmo. Y posteriormente, vino la creación del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).